De acuerdo con los psicólogos Diaz-Loving y Draguns, en EUA, la amistad se centra en divertirse, en pasársela bien. Está basada en lo que es más conveniente o en cuestiones circunstanciales, como la proximidad física o la movilidad geográfica. En gran medida, se trata de un vínculo temporal, que puede establecerse con casi cualquier persona sin grandes obligaciones o compromisos que puedan interferir con nuestra libertad y sin la expectativa ser una relación a largo plazo.
Por otro lado, los autores explican que, en sociedades más tradicionales y colectivistas, como la mexicana, los amigos están unidos por fuertes lazos de afiliación. La amistad tiene un significado profundo y un carácter selectivo. Está marcada por rituales que implican obligaciones mutuas y existe la expectativa de conservar el mayor tiempo posible, tal vez por el resto de nuestra vida, a menos que decidamos terminarla porque la otra persona incumplió su deber.
Los mexicanos vemos a nuestros amigos como presencias permanentes en su vida, con quienes compartimos una lealtad estricta y duradera. Un verdadero amigo, se convierte en un miembro de nuestra familia.
Commentaires